La Iglesia venezolana se pronuncia sobre las elecciones para la Constituyente

Ante la grave situación de zozobra política y social en Venezuela, cuando el país se bate por salvar una democracia ya en agonía, los líderes de la Iglesia elevan su voz en defensa de los valores de la libertad y del derecho de auto determinación de su pueblo.

Redacción CAL
04/08/2017
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La_Iglesia_venezolana_se_pronuncia Foto tomada de: http://www.defrentebarinas.info

El 27 de julio, poco antes de las elecciones para la Asamblea Nacional Constituyente convocada por Maduro, la Conferencia Episcopal de Venezuela se pronunció con un duro mensaje de condena a dicha iniciativa. El mensaje, que lleva un sugerente y también contundente subtítulo, con una frase tomada del libro de la Sabiduría: Dios no hizo la muerte ni se recrea en la destrucción de los vivientes (Sabiduría 1,13), lleva la firma de los Sres. Obispos y Arzobispos Diego Rafael Padrón Sánchez, Arzobispo de Cumaná y Presidente de la CEV; José Luis Azuaje Ayala, Obispo de Barinas y 1° Vicepresidente de la CEV; Mario Moronta Rodríguez, Obispo de San Cristóbal y 2° Vicepresidente de la CEV; Víctor Hugo Basabe, Obispo de San Felipe y Secretario General de la CEV; Cardenal Jorge Urosa Savino, Arzobispo de Caracas y Presidente Honorario de la CEV; y Cardenal Baltazar Porras, Arzobispo de Mérida y Presidente Honorario de la CEV.

A continuación los 7 puntos del mensaje:

1.- Faltando pocas horas para las elecciones de la Asamblea Nacional Constituyente, la Presidencia de la Conferencia Episcopal Venezolana reitera su rechazo a esa iniciativa, por considerarla inconstitucional, pero además, innecesaria, inconveniente y dañina para el pueblo venezolano. En efecto: no ha sido convocada por el pueblo, tiene bases comiciales inaceptables, y en ella estarán representados sólo los partidarios del oficialismo. Será un instrumento parcializado y sesgado que no resolverá, sino agravará los agudos problemas del alto costo de la vida, la escasez de alimentos y medicamentos que sufre el pueblo, y ahondará y empeorará la profunda crisis política que padecemos actualmente.

2.- Vivimos horas difíciles cargadas de incertidumbres y contradicciones, lo que en otras latitudes es expresión normal de la ciudadanía, entre nosotros se convierte en enfrentamientos de creciente intensidad y con un ventajismo desgarrador: efectivos militares y policiales, y grupos civiles armados afectos al gobierno, obran coordinadamente atropellando al pueblo que manifiesta su descontento y su rechazo a la asamblea constituyente.

3.- Una vez más alzamos nuestras voces contra la violencia, venga de donde venga. Es preciso que si se da ese proceso, que no apoyamos, se desarrolle sin violencia. La violencia no puede ser nunca la forma de solucionar los conflictos sociales que se agravan día a día en nuestra sociedad venezolana. La represión desmedida con saldo de heridos, muertos y detenidos genera mayor violencia.

4.- Queremos recordarle a la FANB, responsable en estos días con el Plan República, que su primera obligación es con el pueblo y está llamada constitucionalmente a defender la vida de todos los ciudadanos, sin distingos de ninguna clase ni parcializaciones políticas. Los hechos del día de ayer no parece que vayan en esa línea; por tanto, que en estos momentos de tensión no sea la irracionalidad y la fuerza bruta la que pretenda solucionar el reclamo de buena parte de la sociedad.

5.- El papel primario de la FANB es mantener la paz y el orden para que la racionalidad y el actuar de las partes en conflicto tienda puentes que superen el caos en el que estamos sumidos. No aumentemos más el sufrimiento y la angustia de tanta gente que quiere vivir en paz, que se escuche y respete su voz de protesta y se encuentren caminos de entendimiento y bien para todos. Como nos dice el Papa Francisco "el conflicto no puede ser ignorado o disimulado. Ha de ser asumido. Pero si quedamos atrapados en él, perdemos perspectivas, los horizontes se limitan y la realidad misma queda fragmentada" (EG 226).

6.-Desde el fondo de nuestro corazón y como expresión de fraternidad surgen dos expresiones muy humanas y cristianas: un "no matarás" física o moralmente en forma de violencia y represión que generan muertos, heridos y encarcelados; y un "cultiva la vida" en medio del pueblo por la solidaridad que comparte el pan, el medicamento, la vida en común, la verdad que enaltece, el bien que nos hace mejores, la fe que siembra esperanza.

7.- Que el Señor y la Virgen de Coromoto bendigan a Venezuela y que los venezolanos podamos resolver nuestros conflictos de manera pacífica. Amén.

Declaraciones del Cardenal Urosa

El mismo 30 de julio, día de la votación, el Cardenal Jorge Urosa Savino, Arzobispo de Caracas, declaró que la la Constituyente es "ilegal e inválida porque no fue convocada por el pueblo", y añadió que ésta “agravaría los conflictos del país”, lejos de solucionar los problemas.

El Cardenal señaló que su posición no es una simple postura política, sino que manifiesta unánimemente la posición de la Iglesia en favor de la gran mayoría de la población, que sufre a diario las consecuencias del régimen de Maduro. La Iglesia “no está parcializada hacia la oposición” –indicó–, sino que está a favor "de la mayoría de los venezolanos".

Unos días antes, en declaraciones a la agencia de noticias Aci Prensa, el prelado había recordado la masiva manifestación de apoyo internacional en favor del pueblo venezolano, contra la amenaza en Venezuela de un régimen de dictadura férrea, similar a la que ha vivido cuba por más de 50 años. “Esos países –señaló en esa ocasión– se han dado cuenta de que el proyecto que se tiene es un proyecto que no va a hacer sino hundir más al pueblo venezolano” que está “sometido actualmente a una carestía, a una hambruna, a una agitación política permanente, a un control del Estado, a un chantaje del Estado sobre los empleados públicos”.

El Cardenal también adelantó lo que parece haber sido el resultado de la votación, realizado con altísimas sospechas de fraude electoral, cuando afirmó: “Es un porcentaje pequeñísimo el que va a participar en estas elecciones de la Constituyente”. Efectivamente, la empresa internacional Smartmatic, con sede en Londres, declaró oficialmente que se había perpetrado un fraude de “al menos” un millón de votos, aunque se considera que son cifras bastante moderadas, pues la agencia Reuters hizo un conteo total de 3.8 millones de votos, es decir varios millones de votos menos de los que declara el gobierno.

Sobre este tema también se pronunció el día 3 de agosto Mons. Mario Moronta, Obispos de San Cristóbal, en una entrevista que le hizo José Vidal, en la que manifiesta una posición muy abierta y firme de condena contra las últimas acciones del régimen, y habla de la extrema situación política y social del país, así como de las perspectivas en el corto y mediano plazo.

Entrevista a Mons. Mario Moronta

José Vidal – ¿En su mensaje al Pueblo de Dios hay una petición clara y abierta a las Fuerzas Armadas, para que se rebelen contra el Gobierno de Nicolás Maduro o ésta es una interpretación forzada de su escrito?

Mons. Moronta. Puede resultar una interpretación forzada. El verdadero sentido es el de un llamado a que obedezcan a su conciencia y a su compromiso de respetar la Constitución, así como defender al pueblo. La Fuerza Armada no está ni debe estar al servicio de un solo gobernante ni de una parcialidad política. Es cierto que muchos están invitando a que la Fuerza Armada desconozca al Presidente. Yo creo que más bien, entre otras cosas, la Fuerza Armada debe exigirle al Presidente que respete la Constitución a la cual ellos juraron defender. Apelamos a su conciencia para que no siga habiendo ni violencia ni represión inhumana. Son muchos los muertos y heridos.

Por eso incluso le pido a los sacerdotes de mi diócesis que son capellanes militares que les hablen al corazón y actúen con temor de Dios. Lo triste de la actuación de muchos militares es que ellos no parecen reconocerse como hijos del pueblo al cual están atacando. He podido hablar con un buen número de oficiales y soldados que no están de acuerdo con lo que está pasando.

Por otra parte, quienes ordenan matar o disparar o reprimir son tan responsables -y quizás más- de quienes ejecutan órdenes. Ya es hora de que le exijan al Gobierno que hay que respetar la Constitución y estén del lado del pueblo al cual deben servir y del cual forman parte.

– También pide al Gobierno que convoque ya elecciones generales

Unido a los Obispos y a la gran mayoría de los venezolanos le pedimos al Gobierno que retirara la propuesta de la asamblea constituyente. Hizo caso omiso. Si desde hace tiempo, como lo establece la Constitución se hubiera permitido el referéndum revocatorio, o se hubieran comenzado a realizar las elecciones regionales para luego las de carácter general no estuviéramos como estamos. Una de las excusas es que no había dinero. Y de dónde salieron los recursos para pagar el CNE y las así llamadas elecciones para la Constituyente.

Por otro lado había la excusa de que no se podía cambiar el ordenamiento jurídico. Y cómo sí se pudo hacer lo del pasado 30 de julio: manipularon la constitución y las leyes....

– ¿Aumenta el riesgo de una guerra civil en Venezuela?

Sigo pensando y deseando que no habrá guerra civil, aunque están las puertas abiertas a serias confrontaciones de grupos sociales y políticos. Para que haya guerra debe haber dos ejércitos y eso no está sucediendo en Venezuela por ahora. Hay riesgos de confrontaciones entre hermanos. Hay grupos que están armados y crean zozobra.

Pero también existe el riesgo de levantamientos de grupos de la población ante el hambre que está golpeando a muchos venezolanos, así como la falta de insumos médicos y atención en el campo de la salud. Crece la inseguridad y el futuro es visto muy negro. Allí es donde está el verdadero peligro. Y no olvidemos que los militares tienen familia: y muchas de esas familias están siendo golpeadas por el hambre y otros factores.

Sí existe el peligro real de volver más atrás de lo que hemos tratado de superar: volver al régimen de "seguridad nacional" que tanto daño hizo en América Latina en los años sesenta. Algunas actuaciones de órganos de seguridad están yendo por ese camino.

– ¿Qué le dice, monseñor Moronta, a los más de 8 millones de venzolanos, que acaban de apoyar la Constituyente?

Primero que nada nadie se cree el cuento de que fueron ocho millones. Ni ellos mismos. Yo pude ver cómo muchos centros electorales donde solía haber gran afluencia no llegaban a tener ni el 5% de los electores. El CNE engañó a todo el mundo con esa cifra. Quienes votaron no llegan ni al 15% del padrón electoral...

– Algunos eclesiásticos, como el jesuita Numa Molina, defienden a fondo el régimen de Maduro, por estar de lado de los pobres.

Si estuviera al lado de los pobres ya se habría abierto un canal humanitario o como lo quieran llamar ellos para poder recibir alimentos y medicinas... Una cosa es la demagogia y otra es el compromiso con los más pobres. Puedo asegurarle que la pobreza ha aumentado en Venezuela. Sin querer jactarme ni caer en presunciones, le puedo asegurar que quienes caminamos con el pueblo y nos sentimos pueblo, vemos con angustia y caridad pastoral el drama de mucha gente. Yo trabajo en una zona de frontera y tratamos de ayudar a muchos que necesitan su sustento y atención; pero también vemos con preocupación cómo por nuestros caminos que conducen a la hermana Colombia cada día va aumentando el número de hombres y mujeres, con sus hijos y otros familiares, que van saliendo para dirigirse a otros países para ver si pueden conseguir una vida digna. El Gobierno no parece fijarse en esto.

Puedo asegurarle que nuestra Iglesia está al lado de los pobres.

– ¿Le gustaría que el Papa se pronunciase ya y abiertamente sobre la situación venezolana?

Creo que el Papa y sus más estrechos cooperadores, como el Cardenal Parolin, lo han hecho. No sólo por sus mensajes públicos sino también por otras formas de expresión. El Papa sabe muy bien lo que sucede en Venezuela y nos acompaña. Los Obispos estamos en plena comunión con él. En junio pasado los miembros de la presidencia de la CEV nos reunimos con él para informarle de primera mano y voz lo que de verdad está pasando acá.

– ¿Espera que Francisco hable de Venezuela desde Colombia en su ya próximo visita al país vecino?

No sólo lo espero sino que lo deseo. Estoy seguro que lo hará. ¿Dónde? No lo sé, pero estoy seguro que en algún momento no sólo hablará de Venezuela, sino hablará a los venezolanos con su mirada puesta en nuestro país y en su pueblo.

3 de agosto de 2017.